miércoles, 15 de marzo de 2017

El agitador vórtex

idea y realización: Cristina Blanco.
con Cristina Blanco.

 
15 de marzo de 2017. Teatro Campoamor, Oviedo. 75’ aprox.


Una chica quiere hacer una película y la hace. Delante de nosotros. En directo. Vemos las secuencias en una pantalla y a ella filmándolas y protagonizándolas. Sin trampa ni cartón. Bueno, con bastante cartón y algunas bonitas trampas. La protagonista no tiene claro de qué genero podría ser su película. La que nosotros vemos los mezcla todos. También el cine y el teatro.

Hago la reseña en el blog de teatro pero también podría haberla hecho en el de cine. De hecho, hemos visto esta cosa extraña dentro de la tercera edición de la Semana del Audiovisual Contemporáneo que tiene lugar estos días en Oviedo. Una cosa extraña, pero deliciosamente extraordinaria. Y divertida, desmañada, ajustadísima, imperfecta, impecable, de una ingenuidad casi naíf y de una lúcidez sorprendente. Una propuesta cinematográfica de carácter metateatral y una reflexión cinematogrática convertida en experimento escénico. Y todo con una única persona al mando. Una actriz desenfadada de voz preciosa y gestualidad que enamora a la cámara, una directora irónica que reúne perfectamente la capacidad de diseñar y ejecutar, esa cualidad con la que Ortega caracterizaba a la mejor técnica del artesano. Ella es una artesana de las artes escénicas y audiovisuales con una creatividad sorprendente que a nadie puede dejar indiferente. Se llama Cristina Blanco y es la responsable de lo mucho que hemos disfrutado esta noche con esta cosa extraña y maravillosa que es El agitador vórtex. Una delicia inclasificable que nadie debería perderse.