viernes, 8 de abril de 2016

Cervantina

Versiones y diversiones sobre textos de Cervantes. Dirección: Yayo Cáceres.
Compañía Nacional de Teatro Clásico en coproducción con Ron Lalá.
con Juan Cañas, Miguel Magdalena, Álvaro Tato, Daniel Rovalher e Íñigo Echevarría.
 
8 de abril de 2016. Teatro Palacio Valdés, Avilés. 90’ aprox.


Un repaso por la vida de Cervantes y por algunos de sus textos. Escenas de El celoso extremeño, El coloquio de los perros, El hospital de los podridos, El licenciado Vidriera, El retablo de las maravillas, El viejo celoso, La Galatea, La gitanilla, Persiles y Sigismunda, Rinconete y Cortadillo y Viaje del Parnaso. Y (como no) algo del Quijote y hasta del prólogo de las Novelas Ejemplares. Todo en formato ronlalero. Es decir, con mucha música, mucho humor y mucha calidad. 

Tras su extraordinario En un lugar del Quijote de hace dos años Ron Lalá no podía faltar a la cita del cuarto centenario y nos inocula esta magnífica Cervantina que es un virus contagioso entre los amantes del teatro y los textos de los clásicos. Más de cuarenta personajes encarnados por cinco actores polivalentes que hacen música, cantan e interpretan con una alegría y una pasión que se sale del escenario y alcanza hasta la última fila del gallinero. Aunque todos están increíbles debo reconocer mi fascinación por el trabajo de Iñigo Echevarría, un actor con cuerpo quijotesco y voz poderosa que abre la obra como musa de Cervantes. La letra de la canción de la Cervantina que interpretan al final no puede ser más atinada como diagnóstico de un país que, por sus ilusiones bilingües o por su papanatismo cultural,  casi celebra más a Shakespeare que a Cervantes. Menos mal que existe Ron Lalá.